Les nostres recomanacions i propostes

Publicado originalmente en 1971, una época en la que el suicidio era una cuestión todavía más tabú de lo que es hoy en día, el libro de Alvarez es de una enorme valentía; no solo por el tema escogido, también por la perspectiva de su investigación. Dos cuestiones personales se interponen en la objetividad académica de la obra sin detrimento (al contrario) de su valía: el intento de suicidio de Alvarez cuando contaba treinta y un años y su amistad con Sylvia Plath, que terminó con su vida en 1963.

Alvarez, crítico literario de oficio, presta especial atención a la presencia del suicidio en las letras, desde las contemporáneas hasta las antiguas, pasando por poetas de la talla de Donne, Shakespeare o Dante. Este enfoque le permite acercarse al suicidio desde la paradoja de la belleza, y así consigue que ampliemos nuestro campo de visión en una cuestión tan compleja. A pesar de que el tema del libro de Alvarez no conjuga bien con las festividades propias de estas fechas, su lectura consuela e ilumina, y nos convence de que el mundo es un lugar complejo y con muchas aristas, en el que, a pesar de todo, merece la pena vivir.