Les nostres recomanacions i propostes
ALTRES RESSENYES
Ressenya
Enrique Vila-Matas
Marienbad eléctrico
Per Blog de La Central
6.5.2016
Pero no, uno no tarda demasiado en descubrir que a pesar de la relación próxima y cómplice, a pesar de sus charlas en el café Bonaparte, también el escritor es una víctima, voluntaria por supuesto, de los trucos de DGF. Y que este libro no es exactamente aquel libro que uno creía tener entre las manos, sino algo de mayor calado y holgura. Aquello que se desentraña en estas cien páginas se escapa de los dominios del arte contemporáneo y penetra en la compleja materialidad del arte de la conversación. Unas conversaciones que son «más interesantes como experiencia que como imagen» y que sirven como base a un juego de pistas e intrigas, en el que nunca sabemos si es más valiosa aquella información que se oculta o aquellas ideas esbozadas, recomendaciones desafortunadas o pasos en falso, que se arrojan con la intención de desafiar la agudeza mental de aquel a quien admiramos tan profundamente. Es este poderoso vínculo creativo que muy de vez en cuando se establece entre dos individuos, aquello sobre lo que Vila-Matas nos habla aquí, y lo hace para recordarnos lo caprichosos que son los designios del azar, tanto más en cuanto se cruzan con los de la creación. En efecto, en esa primera entrevista a tres bandas oficiada por Hans Ulrich Obrist en la casa de veraneo de los Lorca, se fraguó una fascinación que desembocó en un fructífero intercambio de ideas en forma de correos electrónicos, encuentros, alucinaciones, pero también de silencios. Enriquecer nunca fue sinónimo de clarificar, y aquello que Vila-Matas se propone en estas páginas es enriquecer el universo extratemporáneo, futurista y a la vez sembrado de flashbacks, del que es dueña DGF. Este es el delicado testimonio de una perfecta relación de admiración, el recuento de una amistad que acoge la incertidumbre, el desencuentro y la objeción como ingredientes indispensables.