Impromptus. Entre la pasión y la reflexión

"Filosofar es pensar la propia vida y vivir el pensamiento propio. Entre ambas cosas subsiste, sin embargo, un décalage que nos constituye y nos desgarra. De ello la filosofía suele ser su negación. ¿Para qué pensar si es para vivir tan poco? La paranoia, decía Freud, es "un sistema filosófico deformado", y un sistema filosófico, agregaría yo, es una paranoia exitosa...
Quiero ensayar otra cosa, algo diferente de esta paranoia de los sistemas, algo diferente, incluso, de ese éxito: una filosofía a la intemperie, muy cerca de la vida real, de sus fracasos, de su fragilidad, de su perpetua y fugitiva improvisación... Y por eso la palabra "impromptus", tomada de Schubert, me ha parecido que puede designarla apropiadamente"

(A. Comte-Sponville)