El grupo se llama R.E.M.


El grupo se llama R.E.M.

A finales de los años 70, algo se estaba fraguando en la ciudad universitaria de Athens,
Georgia, donde empezó a emerger un sustrato de jóvenes con inquietudes artísticas que
no tardarían en formar grupos de rock. De este entorno surgieron The B-52’s o Pylon, y
poco después una de las bandas que alcanzaría el cénit del rock: R.E.M.
Michael Stipe (voz), Peter Buck (guitarra), Mike Mills (bajo) y Bill Berry (batería)
tomarían las riendas de los precursores pero llegarían mucho más lejos. Tras los inicios en
el sello independiente I.R.S., donde publicaron algunos singles y álbumes que forjaron una
comunidad de fans acérrimos, ficharon por Warner, multinacional para la que grabaron
discos fundamentales como Green, Out of Time y Automatic for the People, y temas como
«Losing My Religion» o «Shiny Happy People», entre muchos otros hits, que vendieron
millones de copias en todo el mundo. Pero, a pesar del éxito, R.E.M. consiguieron
mantenerse a flote entre el vendaval de la fama y las interminables y multitudinarias giras,
y preservar una libertad creativa que forjó canciones memorables y los encumbró como
uno de los grandes grupos de rock de los últimos tiempos. Esta es su historia.