¿Existe la felicidad?

¿Cansado de comer alimentos macrobióticos? ¿De destrozarte las rodillas todas las mañanas corriendo por el asfalto? ¿De perseguir el liderazgo en tu empresa cuando no consigues ni hacerte escuchar en una reunión de comunidad? ¿De ligar poco por mucho que te matas en el gimnasio? ¿De hacer viajes eternos en los que se supone que te vas a encontrar contigo mismo y lo único que consigues es gastarte una pasta, que te pierdan la maleta y volver con diarrea? En deinitiva, ¿estás cansado de buscar la felicidad? ¿no será que a lo mejor la estamos buscando en los sitios equivocados? ¿Y si tu felicidad consistiera en comer lo que quieres, viajar a donde quieres y estar tirado en el sofá cuando tú quieres? La felicidad es un negocio y decir que uno es feliz es trendy. También está de moda enseñar en las redes sociales lo felices que somos. Cada día en el móvil y en el correo electrónico recibimos decenas de fotos de gatos, perritos y bebés con frases célebres, pensamientos profundos del tipo: «Si quieres ser feliz piensa por ti mismo. es una orden», todo ello con tipografías hipster. «¡A por el lunes con ilusión!», dicen una legión de descerebrados en Twitter a las seis de la mañana. A través de amenos acercamientos a las diferentes vías modernas de «alcanzar la felicidad», y deteniéndose en la ilosofía, la historia, la sociología y otras ciencias para refutar las modas y buscar respuestas, Toño Fraguas nos ayuda a acabar con los mitos y a contestar a la pregunta del millón de euros: ¿existe la felicidad?